En este tiempo de pandemia, Guatemala continúa recibiendo en sus fronteras y aeropuerto a personas que son deportadas de Estados Unidos. Luego de pasar por un proceso para determinar su estado de su salud, son llevados a hospitales o albergues.

Ante la necesidad de atención médica en esta temporada por el COVID-19, el doctor Emilio Ramos, del equipo de Ministerios Nazarenos de Compasión (MNC) del distrito central de Guatemala, se puso a disposición del Ministerio de Salud del país. Él fue asignado a servir en el albergue “Ramiro de León Carpio”, uno de los albergues para migrantes donde se encuentra un grupo de 176 personas.

Cuando el doctor Ramos llegó, no encontró un espacio para colocar la clínica donde atendería a los pacientes, y tuvo que atenderlos a un costado del edificio, a la intemperie.

Pero luego, él se comunicó con la coordinadora de MNC del Área norcentral, Dámaris Kellogg, solicitando el apoyo de la clínica móvil que MNC tiene disponible en caso de emergencia o necesidad.  Con la ayuda del equipo de Trabajo y Testimonio, la clínica móvil fue trasladada al albergue. También enviaron una caja con Nuevos Testamentos, mascarillas y guantes.

Una parte del grupo de MNC asistió para hacer la entrega, (tomando todas las precauciones y protocolos de seguridad) donde compartieron unas palabras de bienvenida y de esperanza, también oraron por ellos y sus familias. “Con la clínica móvil ahora los pacientes podrán ser atendidos con dignidad y privacidad” Dijo Dámaris K.

Esta semana el equipo llevará ropa, ya que es una de las necesidades que las personas tienen, pues no traen más que la ropa que tienen puesta, dijo Dámaris Kellogg.  El gobierno del país les ha proporcionado camisetas, pantalones y sandalias.

“Damos gracias a Dios por la oportunidad de servir a nuestros compatriotas. Tuvimos la oportunidad de conversar con el personal de migración de temas importantes como, el retorno seguro y la inmigración.  Dios está abriendo puertas para servir y ministrar a estas personas que han pasado por un proceso muy difícil”. Finalizó diciendo Dámaris Kellogg.

Fuente: Dámaris Kellogg, coordinadora de MNC del Área norcentral de la Iglesia del Nazareno.