La Iglesia del Nazareno Centro de Alabanza y Proclamación (CAP) Zimatlán, celebró el 1 de septiembre del presente año, 15 años de hacer discípulos semejantes a Cristo.  En la celebración fue invitado a compartir la palabra del Señor el presbítero Óscar Medina Guzmán, quien sirve como superintendente de distrito en Perú. Él alentó a la iglesia a seguir adelante cumpliendo el llamado del Señor.

La iglesia, que se formó en la sala de una pequeña casa en Zimatlán de Álvarez, en Oaxaca, México, ahora es una congregación de 500 miembros que se reúnen en dos celebraciones los días domingos.

Durante 15 años la iglesia ha servido a su comunidad con diferentes proyectos, pero se destacan: Servicios básicos gratuitos, donde de realizaron jornadas con servicios de peluquería, consultas médicas generales y de odontología. Además, reforestación, donde Junto a las autoridades municipales y el grupo de jóvenes de la iglesia, trabajaron reforestando zonas estratégicas de la comunidad.

Actualmente la iglesia está sirviendo a su comunidad por medio de un Centro de Asesorías Personalizadas, en donde un grupo de profesionales y especialistas en diferentes áreas dan asesoría académica a niños y jóvenes de nivel primaria y universitaria, totalmente gratis.

Los primeros tres meses de la iglesia fueron guiados por pastor Alberto Joaquín Zacarías, pero por motivos de salud tuvo que dejarla, fue entonces cuando el pastor Juan de Dios y su esposa Adela González, pastores de misiones del Centro de Alabanza y Proclamación, CAP central, fueron enviados por el reverendo Elías Betanzos, superintendente del distrito Oaxaca Norponiente, y desde entonces han estado al frente de la iglesia.

“El desafío es que la misma pueda extenderse a ser una iglesia de 1000 miembros, para ello seguiremos trabajando con los principios aprendidos en el CAP… Creemos que Dios nos respaldará y que en Zimatlán Oaxaca, se seguirá proclamando y exaltando el nombre de Cristo ¡A Dios toda la gloria y honra por estos 15 años de su Iglesia CAP Zimatlán!”

Fuente: pastor Josué Barrera y pastor Juan de Dios González