Salmo 46:10: «Estad quietos y conoced que yo soy Dios».

En tiempos de crisis, de problemas, de epidemias, la Palabra de Dios viene a decirnos “estad quietos”.  Estas palabras imperativas de Dios, si las seguimos nos dan paz; sin embargo ¿qué significan en estos días, en que las autoridades de diferentes países piden a la población mantenerse en los hogares, no viajar, ni movilizarse a los lugares de esparcimiento? (como lo hemos venido haciendo). Eso, también es “estar quietos”. Y para muchas personas, es un tiempo de incertidumbre y confusión, pues de un momento a otro, les ponen en una situación a la que no están acostumbrados. Parar la costumbre de ir al trabajo, estudio, ver a los amigos, ir al templo, etc. ¡Cómo les va a costar a algunos esta situación!

Aquí les compartimos algunas ideas que le ayudarán:

  1. Busque llenar tiempo con actividades en familia. Tal vez aprovechar para hablar y jugar, ver una película, estar con la esposa y los hijos.
  2. Involucre a toda la familia en algún trabajo para el hogar. Algunos ejemplos pueden ser acomodar muebles, libros, ropa, juguetes, lavar, pinta tu hogar (que todos participen) etc.
  3. Deje tiempo para que sus hijos tengan sus propios juegos. Esto implica conversaciones con amigos por internet.
  4. Tiempo con la familia para desayunar, almorzar, cenar juntos, pasando tiempo suficiente para disfrutarlo.
  5. Realizar tareas que han quedado relegadas por falta de tiempo. Aproveche esta oportunidad.
  6. Descanse bien. Y esto no quiere decir que solamente pase acostado, sino también haciendo cosas que le gusten y que no ha podido hacer por falta de tiempo.
  7. Evite las peleas, los disgustos, los enojos, la intolerancia. Piense en que todos estamos en esto, y debemos cooperar para estar bien. Que no suba la tensión, sino aprenda que es una oportunidad para estar bien con su familia ante esta amenaza.
  8. Sobre todo, piense que, por su vida llena de actividades, muchas veces no tiene tiempo de hablar con Dios. La segunda parte del versículo dice: “y conoced que yo soy Dios”. Estimado amigo, padre o madre, ¿cuánto conoce a Dios? Este es un buen tiempo para leer y estudiar la Biblia ya sea solo o en familia. Retome el valioso tiempo del altar familiar. Así podrá hacer que todos los suyos puedan conocer al Dios poderoso que le cuidará, para que la plaga no toque su hogar. Es un tiempo diferente, es tiempo de estar quietos y aprender a disfrutarlo.

Que Dios le bendiga en todo lo que emprenda hoy.
Dr. Miguel e Irene Garita.
Ministerio Cuidado Familiar, Iglesia del Nazareno Región Mesoamérica.